El presidente colombiano se pronuncia en medio de la tempestad mediática y exige transparencia en la investigación.
Gustavo Petro, el mandatario colombiano, se encuentra en el ojo del huracán tras la revelación de una serie de audios por parte de la revista Semana. Esta situación ha desatado una controversia que ha llevado al presidente a levantar su voz y defenderse enérgicamente de las acusaciones en su contra. Su mensaje principal ha sido claro: “Nadie del Gobierno ha ordenado interceptaciones de teléfonos ni ha recibido dinero de personas vinculadas al narcotráfico”.
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La polémica se originó a raíz de un tuit publicado por el propio Petro, en el cual afirmaba, con un tono relajado y despreocupado, su inocencia frente al escándalo recién revelado. Acompañado de una fotografía sonriente junto a su hija, el tuit rezaba: “¿Intranquilos? ¡Qué va!”
La respuesta del público no se hizo esperar y el tuit se convirtió en objeto de críticas generalizadas en las redes sociales. Muchos usuarios expresaron su indignación, calificando al presidente de “cínico” y exigiendo una explicación detallada sobre los audios filtrados.
Posteriormente, Petro retomó el tema en las redes sociales y, a través de una serie de tuits, recordó los tiempos de campaña. Relató cómo, durante el gobierno de Duque, una agencia de inteligencia había grabado ilegalmente todas sus conversaciones en Zoom en los meses previos a las elecciones.
A pesar de ello, Petro aseguró con certeza que “nunca pudieron publicar ni un minuto en el que yo dijera algo ilegal o irregular”.
Además, el mandatario lamentó la falta de avance en la investigación de esas grabaciones ilegales, recordando cómo el caso no había generado revuelo en su momento. Sin embargo, la defensa de Petro no se detuvo ahí, desmintiendo categóricamente las acusaciones planteadas en los audios filtrados.
“Nadie del gabinete del gobierno, ni directores ni comandantes de la fuerza pública, ni directores de organismos de inteligencia han ordenado interceptaciones de teléfonos, allanamientos ilegales o aceptado chantajes relacionados con cargos públicos o contratos. Tampoco hemos recibido dinero de personas ligadas al narcotráfico, ni mucho menos manejado cifras como 15.000 millones por fuera de nuestra contabilidad”, aseguró.
Petro destacó su firme rechazo hacia el chantaje y su visión de la política como un espacio para promover la justicia social en Colombia. “Eso es lo que me impulsa y obsesiona”, declaró, agregando que si hay personas con otra lógica dentro del gobierno, es preferible que se separen de él.
Aunque Armando Benedetti, responsable de los audios, insiste en que estos fueron manipulados, Petro señaló que, si bien acepta sus disculpas, Benedetti debe rendir cuentas ante la Fiscalía y ante todo el país.
