El Pentágono confirmó que el presidente Joe Biden ordenó los ataques en respuesta a los recientes ataques contra las fuerzas estadounidenses en la región.
Estados Unidos realizó este jueves ataques aéreos contra dos instalaciones de una milicia proiraní en el este de Siria, cerca de la frontera con Irak, según informó el Pentágono.
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Los ataques fueron ordenados por el presidente Joe Biden, como una medida de defensa propia y de disuasión ante los recientes ataques contra las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria.
Según el comunicado del Pentágono, las instalaciones atacadas pertenecen al grupo Kataib Hizbulá, una de las milicias más poderosas e influyentes de Irak, que cuenta con el apoyo de Irán. El grupo ha sido acusado de perpetrar varios ataques con cohetes y drones contra las bases militares y diplomáticas de Estados Unidos en la región.
El Pentágono indicó que los ataques de este jueves fueron “proporcionados” y “limitados” y que tenían como objetivo “degradar la capacidad de la milicia de llevar a cabo futuros ataques”. Asimismo, afirmó que los ataques se realizaron en coordinación con el gobierno iraquí y con los socios de la coalición internacional que lucha contra el Estado Islámico (ISIS).
El secretario de Defensa, Lloyd Austin, dijo que los ataques fueron “un mensaje claro” de que Estados Unidos actuará para proteger a su personal y a sus intereses en la región. También advirtió que si los ataques de la milicia proiraní continúan, Estados Unidos no dudará “en tomar las medidas necesarias” para defenderse.
Los ataques de este jueves se producen después de que el pasado 17 de octubre una base militar estadounidense en Irak fuera bombardeada con 14 cohetes, que causaron la muerte de un contratista civil estadounidense por un infarto y heridas a varios soldados. La milicia proiraní Resistencia Islámica en Irak reivindicó el ataque y amenazó con más acciones contra las fuerzas estadounidenses.
