Los asesinatos se registraron durante el primer trimestre de este año.
Ludys Ovalle Jácome
Especial para El Tiempo
Valledupar
El primer trimestre de este año ha sido trágico para la población femenina del Cesar, marcado por una estela de crímenes que involucra a nueve mujeres, con distintas edades, diferentes localidades y con patrones comunes de violencia.
Los asesinatos dispararon las alarmas en esta zona del Caribe colombiano y conmocionaron a la comunidad, que, en algún momento, llegó a pensar que los casos tendrían relaciones entre sí. Luego, los elementos probatorios recaudados por la Fiscalía descartaron que se tratara de un mismo agresor.
Las víctimas de estos episodios violentos son: Inés María Fragoso Herrera, Carmen Isabel Lozada Bueno, Cindy Julieth Bustos Ospino, Mary Carmen Galúa Rivera, Nohelia Raquel Turizo Obredor, Arelis Montesino Mozo, Luiselen Michele Rodríguez Linares, Nurys Milagro Rubiano y Juana María Escorcia Baena.
Siete de estos hechos fueron esclarecidos por el ente investigador: cuatro feminicidios y tres homicidios.
Uno de los casos del delito de feminicidio agravado, de mayor impacto en Valledupar, fue el de Nurys Milagro Rubiano, quien, al parecer, fue abordada violentamente por Álex Wilmer Barbosa González, alias el Indio.
La mujer se encontraba consumiendo estupefacientes cuando fue golpeada por su agresor con la cacha de un arma de fuego en el cráneo, el rostro y el tórax. Presuntamente, su atacante le propinó varias puñaladas.
Se pudo establecer, además, que Barbosa González habría utilizado un cable de teléfono para ahorcar a la víctima, quien fue arrastrada y colgada en una vivienda del sector, donde quedó a la vista de todo el barrio.
La captura del implicado estuvo a cargo de uniformados de la Policía Nacional y de servidores del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI).
Las líneas de acción en estos casos
Durante la investigación de los siete casos, se trazaron dos líneas de acción, en las que se determinó la tipología del delito.
“Toda muerte de mujer no es feminicidio, hay que desentrañar la motivación que tiene el agresor para quitarle la vida. Si es por discriminación de género, es feminicidio. Si no está asociado a esto, es homicidio. Entonces trabajamos en estas dos líneas”, explicó Andrés Alberto Palencia Fajardo, director Seccional de Fiscalías Cesar.
Toda muerte de mujer no es feminicidio, hay que desentrañar la motivación que tiene el agresor
Los índices de esclarecimiento
Durante este mismo periodo, la tasa de asesinato de mujeres está por encima de la pasada vigencia. Algunas de estas agresiones fueron ocasionadas por las parejas y exparejas de las afectadas. Otras, por sujetos desconocidos.
Cada caso tiene una hipótesis diferente, asociadas a conflictos de convivencia de pareja, microtráfico y problemas personales en la relación conyugal.
El caso de Juana María Escorcia, una costurera, fue atacada por equivocación
“El caso de Juana María Escorcia, una costurera, fue atacada por equivocación. Los sicarios iban a matar a una persona que vivía en la casa de al lado”, recalcó el fiscal.
Los índices de esclarecimiento de estos casos son del 80 por ciento. En las investigaciones participó un equipo de diez personas, integradas por profesionales que vienen trabajando hace años.
“Tenemos especialistas en levantamiento de cadáveres, informática y otros especialistas que trabajan de la mano de Medicina Legal. A nivel Costa, es la seccional que mejor índice de esclarecimiento tiene: 48 por ciento, midiendo el universo de muertos”, detalló Palencia.

Directora de Comunicaciones de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva,
Amplia experiencia en diferentes medios: Periodismo, Imagen Corporativa, Comunicación Organizacional, Marketing político, Relaciones Públicas, Protocolo, Proyectos Televisivos a nivel nacional, Asesoría de comunicación, Desarrollo de páginas Web y Mercadeo.