Un conflicto entre las disidencias de las FARC y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) resulta en la muerte de tres campesinos.
Un enfrentamiento en la zona rural de Briceño, Norte de Antioquia, entre las disidencias de las FARC y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), ha dejado víctimas en la población civil. Según la Fundación Sumapaz, el conflicto ha resultado en la trágica pérdida de tres campesinos y posibles actos de secuestro.
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Los líderes locales han confirmado estos incidentes, señalando la retención y posterior asesinato de tres campesinos por estos grupos armados. Estos sucesos podrían catalogarse como una masacre en el departamento de Antioquia y representan una flagrante violación de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.
Este incidente ocurre en un contexto donde la ausencia de la Fuerza Pública es notable. Desde el pasado 7 de noviembre, habitantes de la vereda Las Auras obligaron al Ejército a abandonar la zona, citando razones de seguridad.
A lo largo del año, defensores de derechos humanos han señalado constantes enfrentamientos en el Norte de Antioquia, involucrando al ELN, el Clan del Golfo y disidencias de las Farc. Estos conflictos han generado situaciones de hostigamiento, desplazamiento forzado, violaciones del derecho internacional humanitario y la muerte de líderes sociales y firmantes de paz.
Adicionalmente, hace menos de quince días se llevó a cabo la Asamblea Territorial de Paz en la zona rural del municipio de Segovia. Durante este evento, integrantes de grupos armados interceptaron a los asistentes y saquearon varios locales comerciales, lo que agudiza la situación de inseguridad y violencia en la región.
Este informe sobre la situación en Briceño destaca la urgencia de atención y acción por parte de las autoridades para restaurar la seguridad y el respeto por los derechos humanos en la región. La comunidad internacional y las organizaciones de derechos humanos siguen de cerca estos desarrollos, esperando una respuesta efectiva y oportuna para proteger a los habitantes de esta área afectada por el conflicto.