El año pasado se registraron varias quemas de centros ceremoniales en jurisdicción de Valledupar.
Ludys Ovalle Jácome
Especial para El Tiempo
Valledupar
En un acto de intolerancia, desconocidos incendiaron una kankurua de hombres, una construcción sagrada y ceremonial del pueblo indígena kankuamo.
(Además: Nueva York/NJ: Sede final del Mundial 2026)
La comunidad kankuama se mostró indignada y rechazó la acción vandálica, ya que, para ellos, representa una grave afrenta contra la identidad y la idiosincrasia de su pueblo.
El lugar es el corazón de su cultura y de sus tradiciones ancestrales. Está ubicado en Los Haticos, zona rural de Valledupar. Allí realizan rituales de oraciones, medicina tradicional y encuentros de sabiduría espirituales.
Seguiremos luchando fuerte en nuestra misión del cuidado y protección de la vida, de la defensa del corazón del mundo. Nada ni nadie nos detendrá
El líder del pueblo kankuamo, Jaime Arias, condenó el hecho y denunció el hecho ante las autoridades locales.
"La kankurua sufrió daños en la infraestructura del techo. Seguiremos luchando fuerte en nuestra misión del cuidado y protección de la vida, de la defensa del corazón del mundo. Nada ni nadie nos detendrá", afirmó el líder kankuamo.
Arias también exigió que se esclarezcan los hechos y se aplique la justicia a los responsables de este hecho criminal, que calificó como un acto de genocidio cultural.
Asimismo, solicitó el acompañamiento y el respaldo de las entidades gubernamentales, los organismos de derechos humanos y la sociedad civil para garantizar la seguridad y el respeto de los pueblos indígenas.
Este no es el primer ataque que sufren las kankuruas, que son las casas sagradas de los kankuamos. En el año 2023, se registraron varios casos de quema de estas construcciones en las comunidades de Guatapurí, Atánquez, Chemesquemena, La Mina y otros lugares donde habita este pueblo. Estos hechos evidencian la vulnerabilidad y el riesgo que enfrentan los kankuamos y sus bienes culturales.
El pueblo kankuamo es uno de los cuatro pueblos indígenas que habitan la Sierra Nevada de Santa Marta, junto con los arhuacos, los koguis y los wiwas. Su población se estima en unos 30 mil habitantes, distribuidos en 16 comunidades.
Los kankuamos han sido víctimas de múltiples violaciones a sus derechos humanos, especialmente durante el conflicto armado que azotó al país.
kankuamos han desarrollado estrategias
de resistencia y reivindicación de sus derechos
Según el Registro Único de Víctimas, más de 15 mil kankuamos han sido afectados por hechos como desplazamiento forzado, homicidio, amenaza, desaparición forzada, reclutamiento forzado, entre otros. Además, han sufrido la pérdida de sus territorios ancestrales y la contaminación de sus recursos naturales.
Ante esta situación, los kankuamos han desarrollado diversas estrategias de resistencia y reivindicación de sus derechos. Una de ellas es la recuperación y el fortalecimiento de su cultura, su cosmovisión y su organización social. Las kankuruas juegan un papel fundamental en este proceso, pues son el símbolo de la unidad y la armonía de este pueblo con la naturaleza y el creador.
Somos un pueblo de paz. Seguiremos luchando para que este proceso se consolide para el bienestar de todos
Por eso, la quema de las kankuruas no solo es un ataque contra una edificación, sino contra la esencia misma de los kankuamos. Se trata de una agresión que busca borrar su memoria, su historia y su identidad. Es un acto que atenta contra la diversidad cultural y la convivencia pacífica en el país.
“Somos un pueblo de paz. Seguiremos luchando para que este proceso se consolide para el bienestar de todos”, recalcó el líder kankuamo.
Directora de Comunicaciones de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva,
Amplia experiencia en diferentes medios: Periodismo, Imagen Corporativa, Comunicación Organizacional, Marketing político, Relaciones Públicas, Protocolo, Proyectos Televisivos a nivel nacional, Asesoría de comunicación, Desarrollo de páginas Web y Mercadeo.
