El ministro del Interior reiteró que el Gobierno acatará fallos judiciales, pero su defensa de la vía ejecutiva generó cuestionamientos sobre la separación de poderes.
Durante el Congreso de Asobancaria en Cartagena, el ministro del Interior, Armando Benedetti, reiteró el respaldo del gobierno a la consulta popular convocada por decreto presidencial, pese a las críticas de juristas y líderes políticos. “Juro que el Gobierno acatará las decisiones de las cortes”, afirmó ante un auditorio con representantes del sector privado y figuras políticas. ( Además: Ataque atribuido al ELN deja un soldado muerto y otro herido )
Sin embargo, Benedetti reconoció que el Ejecutivo no esperó el pronunciamiento del Consejo de Estado sobre la legalidad de la votación en el Senado, donde la iniciativa fue rechazada con 49 votos en contra y 47 a favor. La firma del decreto por parte de Gustavo Petro ha sido calificada como un riesgo para la separación de poderes en Colombia.
Benedetti insistió en que el trámite legislativo de la consulta tuvo irregularidades, como la falta de lectura de la proposición antes de la votación y la ausencia de los senadores Martha Peralta y Richard Fuentalada. Estas afirmaciones generaron incomodidad en el auditorio, especialmente porque Peralta estaba presente y su salida del recinto durante el debate no ha sido explicada claramente.
Expectativa sobre la Corte y cambios en el tribunal
El ministro negó que haya un golpe de Estado en marcha, argumentando que no hay censura, persecución política ni detenciones arbitrarias. “Lo que hubo fue un bloqueo institucional del Congreso y el Gobierno respondió dentro de la Constitución”, sostuvo. Esta postura fue rechazada por sectores del evento, que señalan que el uso de decretos en temas de participación ciudadana debilita la institucionalidad.
Benedetti mencionó la expectativa del Gobierno por un fallo de la Corte Constitucional que avalaría la legalidad del decreto. Sin embargo, expertos advierten que un aval anticipado, sin esperar el Consejo de Estado, podría agudizar la crisis institucional y romper el equilibrio entre poderes, tal como alertó el filósofo John Stuart Mill en sus estudios sobre repúblicas modernas.
La llegada de magistrados afines al oficialismo, como Vladimir Fernández, Héctor Carvajal y Miguel Polo, ha generado suspicacias sobre la imparcialidad del tribunal. Benedetti insistió en que la decisión judicial será respetada, pero su defensa del decreto refleja la tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo.
Reacciones y simbolismo de gestos
El presidente del Congreso, Efraín Cepeda, y el secretario del Senado han desmentido las irregularidades señaladas, afirmando que el trámite fue legítimo y que el Gobierno simplemente no logró los votos necesarios.
El efusivo abrazo entre Benedetti y la canciller Laura Sarabia al finalizar el evento contrastó con sus anteriores enfrentamientos públicos, generando especulaciones sobre una posible reconciliación. Por su parte, el senador Mauricio Gómez Amin y otros críticos del gobierno reiteraron su preocupación por el desdén del Ejecutivo hacia procesos judiciales.
Fuente informativa:- API