Alejandro Gaviria sostiene que la presidencia de Petro ha sido marcada por la confrontación y la negación del pluralismo.
El exministro de Salud Alejandro Gaviria ha publicado un libro titulado "La explosión controlada", en el que critica duramente la presidencia de Gustavo Petro. Gaviria afirma que Petro es una figura paranoide, desconfiada y, a veces, antagonista.
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Gaviria señala que la paranoia de Petro a menudo lleva a la confrontación, a la negación del pluralismo y a la percepción de que los demás están conspirando contra él. "Por su historia personal, incluso hay que entenderlo, siempre cree que los otros pueden tratar de hacerle daño, que hay conspiraciones todo el tiempo. Asocio esta mentalidad paranoide con posiciones ideológicas extremas", dijo Gaviria.
Según el exministro, los ideales extremos de Petro fueron en gran medida la razón de su renuncia. Gaviria sugiere que el presidente lo vio como un conspirador dentro del gobierno, cuando en realidad, él simplemente intentaba expresar sus opiniones y aportar al debate.
Además, Gaviria critica a Petro por su incapacidad para distinguir entre opositores y enemigos, alegando que el presidente no comprende que las perspectivas opuestas pueden enriquecer su gobierno. "Le queda difícil entender que los contradictores no son enemigos y que esas visiones del cambio podrían incluso complementarse", explicó Gaviria.
Finalmente, Gaviria critica la narrativa heroica que Petro parece haber adoptado, optando por presentarse como un líder valiente enfrentándose a "poderes visibles e invisibles" que conspiran contra él.
El exministro concluye diciendo: "El presidente está instalado en la imagen de héroe romántico de peleas imposibles, esa narrativa es la que más congenia con su personalidad". Este análisis subraya una figura apasionada pero dividida, cuyos desafíos y elecciones definirán su legado en la política colombiana.
