El regreso de las “chuzadas” en Colombia y la implicación de la jefe de Gabinete generan crisis política.
Este primero de junio ha sido un día agitado en el ámbito judicial, debido al caso de Laura Sarabia, jefa de Gabinete de la presidencia de la República, quien ha denunciado la pérdida de 7.000 dólares en su residencia y señala como principal sospechosa a su exniñera, Marelbys Meza.
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Desde el búnker de la Fiscalía, el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, afirmó: “Hoy podemos decir con claridad que las chuzadas, las interceptaciones ilegales, han retornado a Colombia”. El fiscal Barbosa explicó que la Dijín llevó a cabo interceptaciones ilegales a la exniñera Marelbys Meza, a quien perfilaban como “la cocinera” de alias ‘Siopas’, y a otra empleada doméstica, con el objetivo de determinar si alguna de ellas tenía conocimiento del paradero del dinero extraviado.
El escándalo ha puesto en crisis al gobierno del presidente Gustavo Petro, y el exsenador y aliado del mandatario, Gustavo Bolívar, expresó su apoyo al Jefe de Estado y exigió la salida de Laura Sarabia y del embajador colombiano en Venezuela, Armando Benedetti.
“Una disputa interna entre círculos de poder no puede llevar al Gobierno a la crisis y al desprestigio”, manifestó Bolívar. “Laura Sarabia y Armando Benedetti deben abandonar sus cargos”.
Además, pidió la destitución de todos los policías implicados en las interceptaciones ilegales. “Cuento con todo mi respaldo y solidaridad hacia el presidente Petro en este difícil momento”.
Hasta el momento, ni el presidente Gustavo Petro, ni la jefa de Gabinete, Laura Sarabia, ni el embajador Armando Benedetti, han emitido comentarios sobre este escándalo que ha sacudido al gobierno.
