El rey británico se someterá a un tratamiento regular y espera volver pronto a la vida pública.
El Palacio de Buckingham anunció este lunes que el rey Carlos III padece un tipo de cáncer, cuyos detalles no se han revelado.
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El monarca, que accedió al trono hace menos de un año y medio tras el fallecimiento de su madre Isabel II, ha cancelado sus compromisos públicos para iniciar un tratamiento.
La noticia causó un gran impacto en el Reino Unido, que ve cómo su soberano debe enfrentarse a una grave enfermedad. Según el comunicado oficial, el cáncer se detectó durante un reciente proceso hospitalario del rey por un agrandamiento de próstata benigno. Sin embargo, el cáncer no es de próstata, según fuentes de la casa real.
Optimismo y apoyo al rey
A pesar de la incertidumbre, el rey se muestra “totalmente positivo” hacia el tratamiento y desea retomar sus actividades “lo antes posible”. Así lo expresó en el comunicado, en el que también agradeció al equipo médico por su “rápida intervención”.
El primer ministro, Rishi Sunak, le envió un mensaje de ánimo a través de sus redes sociales, asegurando que el rey “volverá a estar al máximo en nada de tiempo”. El monarca, de 75 años, comenzó hoy mismo un “calendario de tratamientos regulares”, pero seguirá desempeñando funciones relevantes como su audiencia semanal con Sunak, las reuniones con el Consejo Privado o la firma de documentos.
La familia, al lado del rey
El rey informó personalmente de su diagnóstico a sus hijos, Guillermo y Enrique, y a sus hermanos, Ana, Andrés y Eduardo. El príncipe Enrique, duque de Sussex, viajará pronto desde California (EE.UU.) a Londres para visitar a su padre, según informó su entorno. Enrique se ha alejado de la familia real, de la que ya no forma parte activa.
Mientras el rey se someta a tratamiento, el resto de la familia asumirá más funciones oficiales, especialmente su esposa y principal apoyo, Camila. La casa real británica ha querido difundir la noticia de la enfermedad desde el primer momento, al contrario que en el reinado de Isabel II. “Su Majestad ha elegido compartir su diagnóstico para evitar las especulaciones y con la esperanza de que pueda ayudar a la comprensión ciudadana hacia todos aquellos en el mundo que están afectados por el cáncer”, dice el comunicado.
Un rey con salud robusta
Carlos III, que apoya a varias organizaciones dedicadas al cáncer, ha disfrutado de una salud fuerte durante toda su vida, sin apenas problemas o enfermedades relevantes. En marzo de 2020, con 71 años, contrajo la covid-19 antes de la llegada de las vacunas, pero solo sufrió síntomas leves. En febrero de 2022 volvió a contagiarse con la enfermedad, pero ya tras haber recibido tres dosis de la vacuna.
El rey es también conocido por las diversas lesiones que sufrió en su juventud practicando polo, uno de sus deportes favoritos. Ahora, deberá afrontar el mayor reto de su salud, con el apoyo de su familia y de su pueblo.
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