El primer mes del año trae consigo ajustes en precios, decisiones del Banco de la República y un nuevo panorama internacional que influirán en la economía nacional.
Enero de 2025 se presenta como un mes crucial para la economía colombiana. Este mes definirá el rumbo de la reactivación económica del país. Además, se conocerán detalles del plan de gasto del Gobierno Nacional. Los ajustes de precios que habitualmente llegan con el nuevo año también serán relevantes. ( Además: Millonario robo en Davivienda: roban 115 millones a dos clientes )
Estos factores, sumados a la coyuntura internacional, configuran un panorama económico complejo, pero con perspectivas de crecimiento. El equipo de economistas de Scotiabank Colpatria analiza estos temas con detenimiento.
Tradicionalmente, enero y el primer trimestre del año traen consigo ajustes importantes en los precios. El aumento del salario mínimo y la inflación registrada al cierre de 2024 impactarán directamente en rubros como arriendos, transporte público y peajes. Se estima que la inflación al finalizar 2024 se ubique alrededor del 5,2%. Esta cifra servirá como base para calcular estos incrementos. Adicionalmente, sectores como restaurantes y otros servicios ajustarán sus precios teniendo en cuenta el aumento salarial. Por lo tanto, los consumidores deben prepararse para estos cambios en el costo de vida.
Balance económico de 2024 y
perspectivas para 2025
Colombia cerró el año 2024 con una expansión económica en ciertos sectores. Entre ellos se destacan la agricultura, el sector público y el entretenimiento. En cuanto al consumo, la demanda de bienes duraderos, como electrodomésticos y vehículos, mostró señales de recuperación en los últimos meses del año. Estos resultados sugieren que la economía colombiana ha superado la fase más crítica de desaceleración. Ahora, ha entrado en una etapa inicial de crecimiento.
Este crecimiento es heterogéneo entre los diferentes sectores. Sin embargo, se espera que en 2025 se generalice. Se prevé que los hogares y las empresas aprovechen un entorno de tasas de interés más bajas, la estabilización de la inflación y un mayor apetito de consumo. Esto impulsará la reactivación de decisiones de inversión y compra que se habían postergado.
El Banco de la República tiene programada su primera reunión a finales de enero. En esta reunión, se podrían confirmar nuevas reducciones en las tasas de interés. Esto se debe a un panorama de inflación en descenso. No obstante, se espera que el Banco de la República se mantenga atento a los riesgos internacionales y fiscales.
También, observará su impacto en los activos locales. La disminución de las tasas de interés podría aliviar los costos de crédito. Además, estimularía la inversión. Para el año 2025, se proyecta que las tasas de interés de referencia se ubiquen entre el 6,75% y el 7%. Esto favorecería una recuperación económica más sólida.
Panorama fiscal para el año 2025
El manejo fiscal será un aspecto fundamental en 2025. Esto ocurre después de un 2024 con recaudos tributarios por debajo de lo esperado. Los desafíos incluyen ajustes en el presupuesto, la creación de planes de financiamiento y el desarrollo de estrategias para aumentar los ingresos. Todo esto sin descuidar el cumplimiento de la regla fiscal.
En enero, será crucial observar el anuncio de la asignación presupuestal. Esto ocurre después del rechazo de la Ley de Financiamiento en diciembre. Igualmente, los mercados estarán muy atentos al inicio de las subastas de deuda pública. Observarán el interés que muestre el mercado en la demanda de los títulos.
Fuente informativa:- API