El colombiano no pierde la ilusión de seguir subiendo en la clasificación general y tiene un par de etapas por delante para buscarlo.
Nairo Quintana terminó la segunda semana del Tour de Francia en el sexto lugar de la clasificación general y mantiene la esperanza de mejorar su ubicación en la última semana de la carrera de ciclismo más importante del mundo. Llegan los Pirineos y allí se llevarán a cabo las últimas dos etapas que tienen final con un puerto de montaña.
Esas jornadas son las que tiene apuntadas el boyacense como claves en la lucha por los primeros puestos de la general. La primera es el miércoles y la otra el jueves. La de este martes tiene varios puertos, pero no termina en ascenso. El sábado, la lucha por la general terminará con una contrarreloj de 40 kilómetros.
Quintana se siente en óptimas condiciones y es por eso que tiene esperanzas de que podrá figurar en la última semana del Tour. El colombiano atacó a los favoritos en la etapa 10 y les sacó un tiempo considerable, aunque lastimosamente en las otras jornadas montañosas de la segunda semana cedió segundos valiosos.
En su diálogo con los medios de comunicación luego de la etapa 15, Nairo dejó entrever que, en caso de sentirse bien físicamente, hará lo posible por volver a atacar a sus rivales, ahora en los exigentes Pirineos.
“Física y mentalmente estamos muy bien. Así que vamos a atacar estos Pirineos, etapas muy bonitas y etapas que conocemos muy bien. Ya lo hicimos en alguna etapa (atacar a sus rivales). La montaña pone a cada uno en su sitio. Estamos cuatro o cinco corredores peleando por el podio”, aseguró Nairo.
El boyacense tiene complicado ascender hasta los primeros tres lugares de la general, porque lo separan unos dos minutos y allí están ubicados ciclistas que van muy bien en la contrarreloj y que le sacarán aún más tiempo al colombiano en esa penúltima jornada del sábado.
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