El gobierno colombiano advierte sobre una escalada de violencia y pide precaución a los uniformados.
Las disidencias de las Farc, una facción disidente de la extinta guerrilla, han intensificado sus ataques contra la policía nacional.
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Según fuentes internas de la institución, se ha detectado un preocupante plan pistola que implica una recompensa de cuatro millones de pesos por cada oficial asesinado, y una recompensa adicional por el robo de armamento.
El reciente asesinato de Paula Cristina Ortega, patrullera de 28 años en Neiva, y la detonación de explosivos contra una tanqueta blindada en Nariño, en la carretera que conecta Junín con Tumaco, han puesto de relieve la cruda realidad de la situación.
Estos incidentes marcan una escalada en las tácticas de las disidencias, que parecen estar buscando oportunidades y debilidades en la defensa policial para llevar a cabo sus crímenes, utilizando métodos cada vez más letales como ataques de francotiradores, explosivos, hostigamientos y emboscadas.
Ante este panorama, el Ministro de Defensa, Iván Velásquez, en un reciente consejo de seguridad celebrado en Bogotá, subrayó la importancia de la precaución por parte de los uniformados.
Según Velásquez, tanto el director de la Policía como el comandante de las Fuerzas Militares han proporcionado instrucciones para implementar los máximos cuidados, prevención y precauciones para evitar que se lleven a cabo más acciones de este tipo.
En una nota similar, el Jefe Nacional del Servicio de Policía, general Carlos Rojas, desde el Cauca, recordó a los patrulleros los protocolos a seguir para anticipar, prevenir y mitigar actos violentos, especialmente en zonas sensibles como Norte de Santander, Arauca y Nariño.
En un comunicado oficial, Rojas envió un mensaje de respaldo a todos los policías de Colombia, aplaudiendo su valentía, vocación y compromiso al trabajar por la convivencia y la seguridad ciudadana en estos tiempos difíciles.
El gobierno colombiano advierte que la violencia de las disidencias de las Farc es una amenaza para la seguridad nacional y pide la colaboración de la ciudadanía para denunciar cualquier actividad sospechosa.
