Por su parte, la Unidad de Gestión del Riesgo instalará una sala de crisis que hará seguimiento a las afectaciones por las lluvias en varios sectores del país.
El Gobierno Nacional anunció que los recursos que ya movilizó para atender la emergencia desatada por las intensas lluvias a lo largo del país se irán a tres prioridades: la atención del hambre, los implementos y medicamentos necesitados, y la reubicación en lugares seguros de las familias que han perdido sus hogares por las inundaciones, deslizamientos y desbordamientos que se registran en al menos cinco departamentos.
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Así lo aseguró este lunes el ministro de Interior, Alfonso Prada, tras finalizar un comité de ministros presidido por el presidente Gustavo Petro que tenía como fin coordinar las acciones del Ejecutivo para mitigar los efectos que ha producido en los últimos días el fenómeno de La Niña. “La primera respuesta la tienen las autoridades municipales, pero el Gobierno se declara en una sala de crisis”, dijo Prada. Y es que, según el Ideam, las precipitaciones podrían prolongarse lo que queda del año y hasta comienzos de 2023.
En ese sentido, Alfonso Prada explicó que el 15 de noviembre se reunirá la junta directiva del Fondo de Gestión de Riesgos para realizar la priorización los recursos destinados a atender la ola invernal. Esta instancia, conformada por distintos ministros, debe determinar en qué se gasta el Estado el dinero que ya fue destinado por el Ministerio de Hacienda a prestar soluciones a departamentos como Cundinamarca, Cauca, Santander, Norte de Santander y Chocó, donde se concentran las afectaciones.
“La primera prioridad va a ser la atención del hambre. No vamos a permitir que por esta perturbación los colombianos queden aislados con desabastecimiento”, aseguró el ministro Prada. A renglón seguido señaló que esa era una directriz del propio presidente Petro. “Adicionalmente, entregaremos kits de frazadas, medicamentos y aquellos elementos que necesiten las comunidades”, añadió, refiriéndose a la segunda prioridad que tendrá el Gobierno en la atención de las emergencias por lluvias.
“Y finalmente, otra prioridad es la reubicación temporal e incluso iniciar la reubicación definitiva, a través de la construcción de vivienda, en sitios seguros”, concluyó el ministro de Interior. Sobre este punto Prada señaló que la relocalización de las familias afectadas se alinea con la política de ordenamiento territorial que el Gobierno incluyó en el Plan Nacional de Desarrollo que presentará el martes 15 de noviembre al Congreso. Un ordenamiento “alrededor del respeto a la naturaleza y al agua”, dijo.
Además de los recursos, el Gobierno instaló dos instancias que le harán seguimiento permanente a las afectaciones por las lluvias en el país. La primera la preside la Unidad Nacional para la Gestión de Riesgos y Desastres (UNGRD) y se llama sala de crisis.
Con apoyo de los ministerios encargados, la entidad va a monitorear todos los días, las 24 horas, los eventos que produzcan las lluvias en el país y va a ser el contacto directo con los comités de riesgo que ya hay instalados en los municipios y departamentos afectados.
A su vez, a partir del miércoles 16 de noviembre va a sesionar semanalmente un Puesto de Mando Unificado (PMU) con presencia del presidente Petro y los ministerios encargados. A este espacio, dijo Prada, también serán invitados los actores regionales que sea necesario.
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