El Defensor del Pueblo denuncia el confinamiento y las amenazas a la población civil en el corregimiento de Santana Ramos.
La situación de orden público en el departamento del Caquetá se ha agravado por la presencia y la confrontación de grupos armados ilegales. Así lo advirtió el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, quien alertó sobre el riesgo para la población civil.
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Según el funcionario, el corregimiento de Santana Ramos, en el municipio de Puerto Rico, ha sido escenario de homicidios selectivos, amenazas, enfrentamientos armados, restricciones y prohibiciones a la movilidad. Estos hechos han afectado la seguridad alimentaria y la atención en salud de los habitantes.
Camargo Assis señaló que la violencia se debe a la disputa entre el Estado Mayor Central y la Segunda Marquetalia, dos grupos disidentes de las Farc. Estos grupos han incumplido los acuerdos del cese al fuego bilateral que se pactó el pasado 3 de agosto entre el Gobierno nacional y el ELN.
El Defensor del Pueblo hizo un llamado para que las entidades del Estado atiendan de manera urgente y articulada la grave situación de derechos humanos en el Caquetá. También pidió a los grupos armados ilegales que respeten el principio de distinción establecido en el derecho internacional humanitario (DIH) y que avancen en gestos de paz.
