Vendedores caminando entre los bañistas, personas sentadas debajo de árboles y muchos sin mantener la distancia, es el panorama en las playas. Distrito asegura que la policía debe hacer operativos.
Ya se cumplieron 5 meses desde que en Cartagena se habilitó al público la primera playa biosegura, que fue Playa Azul en La Boquilla, luego siguieron playa Hollywood, sector El Bonny, sector frente al Nao, sector frente al hotel Cartagena Plaza y frente al Edificio Torre Caribe I, todas en Bocagrande, y finalmente Playa Blanca.
Estos lugares han sido habilitados para locales y turistas, quienes deberían de estar disfrutando de un espacio tranquilo y libre de aglomeraciones, así como se ha venido indicando desde el Ministerio de Salud desde que se inició la pandemia del coronavirus, todo para evitar la propagación de esta nueva enfermedad.
Sin embargo, el panorama en estos lugares e incluso en aquellas playas que siguen cerradas al público, es totalmente diferente. Vendedores por doquier, personas sin tapabocas y aglomeradas ya sea en los módulos o bajo los árboles que están cerca de los paseos peatonales, es lo que se ve día a día en las playas, pero aumenta los fines de semana, sobre todo los domingos.
¿Qué está pasando?
Recordemos que las siete playas bioseguras que están habilitadas fueron adecuadas con módulos, espacio de desinfección, zona para vendedores y espacios de entrada y salida, todo con el fin de mantener un ordenamiento de estos lugares. En principio, los bañistas y vendedores cumplían con lo dispuesto, pero con el pasar de los días todo cambió.
“Se ven muchas personas que vienen a playa y que permanecen sentadas en las zonas verdes, dejando sucio el lugar. Tiran los tapabocas por todos lados, van a bañarse y regresan a estos lugares a sentarse, sabiendo que no está permitido, pues la idea de instalar esos módulos creemos que era para que en la playa pudiera existir un orden, pero no se ha cumplido”, aseguró un residente de Bocagrande, uno de los sectores donde más se ven estos desórdenes.
El residente del sector añade que “los vendedores también están caminando por la zona y sí, ellos deben trabajar, pero se supone que las autoridades deben vigilar que se cumplan las medidas dispuestas”.
Bañistas también aseguran que “venir a playa ahora y como era antes de la pandemia, es lo mismo, la multitud de personas, los cantantes y vendedores ofreciendo sus servicios”.
Habla el Distrito
El Universal se comunicó con María Claudia Peñas, asesora para la Reactivación Económica del Distrito, quien indicó que “hay un equipo de Secretaría del Interior haciendo las inspecciones, la única playa que es administrada por la Alcaldía, a través de Distriseguridad, es Bandera Azul. En las otras se realizó la instalación de los módulos para garantizar el distanciamiento, pero son operadas por las cooperativas de carperos que existen en esas zonas”.
Peñas además indicó que “es obligatorio por parte de la Policía vigilar y garantizar que se cumplan las normas de bioseguridad y el protocolo, así como harán los brigadistas de la Gerencia de Espacio Público una vez estén habilitados, también apoyarán en este proceso. El sentarse debajo de los árboles es una infracción al protocolo”.
Respecto a lo que ocurre con los vendedores, explicó que ellos no están prohibidos, lo que sí deben hacer es “mantenerse en la zona de servicios, que está detrás de los módulos sociofamiliares”.
Desde octubre del año pasado a la fecha, se han registrado más de 200 mil reservas para asistir a las playas bioseguras.
Fuente informativa:
eluniversal.com.co / WENDY CHIMÁ P.