Acciones enérgicas en la lucha contra la violencia infantil y la protección de los derechos de los menores.
En una contundente medida de prevención y protección, las autoridades locales llevaron a cabo operativos de control en establecimientos comerciales de Valledupar durante el fin de semana. Como resultado de estas acciones, se procedió al cierre de tres establecimientos donde se encontraron menores de edad en sus instalaciones, en un claro intento de explotación sexual y comercial.
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Los operativos fueron liderados por el grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía en coordinación con diferentes entidades, entre ellas, la Policía de Turismo, la Secretaría de Gobierno municipal, Migración Colombia, la Secretaría de Salud, Tránsito municipal y el ICBF. El objetivo principal de estas intervenciones es garantizar la seguridad y protección de los niños, niñas y adolescentes que visitan estos lugares, así como brindar tranquilidad a quienes los frecuentan.
Durante los operativos, se impusieron tres medidas correctivas al Centro Nocturno de Control Sanitario y de Convivencia (CNCSC) por incumplir el artículo 38 numeral 1 Literal E, al permitir el ingreso de menores a sus instalaciones ubicadas en los barrios San Joaquín y Los Cortijos. Estas medidas incluyeron el cierre de los establecimientos como sanción por poner en riesgo la vida e integridad personal de los menores.

Además de las acciones de control, se proporcionó información sobre líneas de emergencia e institucionales a la comunidad, con el propósito de fomentar la denuncia de cualquier hecho o conducta que vulnere la protección integral de los niños, niñas y adolescentes. Entre las líneas destacadas se encuentran el 123 de la Policía Nacional, el 141 del ICBF, el 122 de la Fiscalía General de la Nación y el 155, línea de atención a mujeres víctimas de violencia.
Estos operativos demuestran el compromiso de las autoridades y entidades interinstitucionales en la lucha contra la explotación sexual y comercial de niños, niñas y adolescentes en Valledupar. El mensaje es claro: no se tolerarán actos que pongan en peligro la integridad y el futuro de los más vulnerables de la sociedad. La comunidad está invitada a ser parte activa en la protección de los derechos de los menores y a denunciar cualquier situación que represente una amenaza para ellos.