Aspira coronarse como rey de reyes, en la 55 edición del festival de la leyenda vallenata.
Ludys Ovalle Jácome
Especial para El Tiempo
Valledupar
“Sinamu yina dugunti sano besa mano besa mano (un saludo especial para todos mis hermanos)”, con este cálido mensaje de la Sierra Nevada de Santa Marta, José Ricardo Villafañe, rey vallenato arhuaco, inicia sus presentaciones musicales.
El músico indígena marcó un hito en la historia del festival vallenato, tras coronarse el año pasado como rey en la categoría de acordeón profesional.
En cada presentación José Ricardo luce orgulloso el atuendo tradicional de su cultura arhuaca
“Es el acordeonero que participa en la categoría rey de reyes, tras un corto tiempo de haberse coronado como rey vallenato. Es decir, él ganó en octubre del año pasado cuando se realizó el evento en esa fecha por tema de pandemia. Ahora el evento se realiza en su fecha habitual”, destacó un miembro de la fundación Festival de la Leyenda Vallenata.
En cada presentación José Ricardo luce orgulloso el atuendo tradicional de su cultura arhuaca: pantalones gruesos y una túnica blanca manga corta, atada a su cintura con
Sobre sus hombros reposan dos mochilas tejidas con lana de oveja, con dibujos triangulares, que expresan la relación de la naturaleza con el universo. En la parte superior de su cabeza, lleva el gorro ‘tutusoma’, que representa los piscos de la Sierra Nevada.
“Me siento orgulloso de ser parte de los pueblos de la Sierra Nevada. Cuando me presento como rey vallenato es expectante, la gente se desborda de emoción al verme interpretar los ritmos vallenato”, comenta orgulloso el músico.
Su primer contacto con el acordeón fue a los 14 años, de la mano de Andrés ‘El Turco’ Gil, el académico del vallenato.
En las notas acordes de su acordeón también se mimetiza el ‘chicote’, música tradicional de su etnia
En esta línea de aprendizaje, también adoptó como maestros, a los pájaros de la Sierra Nevada, cuyos cantos están plasmados en los acordes de la puya, uno de los aires más rápidos y difíciles de este género musical.
“Un día estábamos en la finca de mi papá y escuchamos a un turpial cantando. Me recomendó que sacara una melodía basada en las aves. Grabé el canto en el celular y lo repliqué en el acordeón. Caló perfectamente en el compás de la puya”, detalló Villafañe.
En las notas acordes de su acordeón también se mimetiza el ‘chicote’, música tradicional de su etnia.
“La puya que interpreté el año pasado fue inspirada en los cantos de las aves, es una representación directa de las emociones, ascendencia e inspiraciones que tiene la tierra donde vengo. El chicote es parecido al son vallenato y gusta mucho dentro de mi cultura arhuaca”, resalta el acordeonero.
Este año aspira seguir cosechando éxitos como músico. Por eso compite en la categoría acordeonero profesional de la 55 edición del festival de la leyenda vallenata, donde busca coronarse como rey de reyes.
En esta oportunidad también se apropia de su identidad arhuaca y aspira potenciar a través de estos eventos musicales, el intercambio de saberes de su cultura, integrando a su pueblo al folclor vallenato.
“Ya los mamos me hicieron una limpieza sagrada. Me dieron un bastón para representar musicalmente a los pueblos de la Sierra. Me encomendé a nuestro creador, kaku zerakwa (Dios), todo saldrá bien”, puntualizó.
Directora de Comunicaciones de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva,
Amplia experiencia en diferentes medios: Periodismo, Imagen Corporativa, Comunicación Organizacional, Marketing político, Relaciones Públicas, Protocolo, Proyectos Televisivos a nivel nacional, Asesoría de comunicación, Desarrollo de páginas Web y Mercadeo.