Los familiares de los menores justifican el ataque alegando que el Juan Felipe tuvo conductas inapropiadas. Mientras tanto, los dispositivos clave para esclarecer el caso siguen sin aparecer.
El 24 de noviembre, Juan Felipe Rincón Morales, hijo del general de la Policía William Rincón, fue asesinado en el barrio Quiroga, sur de Bogotá. El joven, de 21 años, llegó al lugar tras un presunto engaño, según informó la Fiscalía General de la Nación. ( Además: Sicarios asesinan a voluntario de la Defensa Civil en Chiriguaná )
Camilo Andrés Sotelo, señalado como el principal sospechoso, enfrenta cargos por homicidio agravado y es identificado como el tío de una menor de 9 años involucrada en el caso. La Fiscalía sostiene que Sotelo habría disparado y golpeado a la víctima en un acto que, según los familiares de las menores implicadas, fue motivado por presuntas conversaciones inapropiadas entre Rincón y las niñas.
Contradicciones y puntos clave en la investigación
Uno de los aspectos más controvertidos es la desaparición de los dispositivos electrónicos de Juan Felipe, cruciales para confirmar o desmentir las acusaciones. Sergio Felipe Rico Rueda, escolta de Rincón, aportó detalles relevantes al caso. Según su testimonio, Rincón estuvo en compañía de una joven de aproximadamente 20 años el día del ataque, no una menor como se ha señalado.
El escolta también relató que, al llegar al Quiroga, Juan Felipe saludó a una mujer antes de ser atacado por dos hombres armados. Rico Rueda afirmó haber intentado defenderlo, lo que derivó en un intercambio de disparos.
Reacciones de la familia y el entorno
La madre de Juan Felipe pidió respeto y prudencia al abordar el caso en los medios, recordando que no existen pruebas concluyentes sobre las acusaciones en su contra. También explicó que el vehículo Mercedes, vinculado al joven en redes sociales, pertenecía a su tía y no a él.
Con más de 215,000 seguidores en TikTok y 13,000 en Instagram, Juan Felipe era conocido por su contenido sobre decepciones amorosas y su físico, lo que lo hacía especialmente popular entre adolescentes. Tras su muerte, amigos cercanos como @majoov_2 en la plataforma X lo describieron como una persona alegre y apasionada, especialmente por el ping pong, llamando a recordar su lado humano y no solo las controversias.
El caso sigue abierto, con las autoridades enfocadas en esclarecer los motivos del crimen y determinar la verdad detrás de las acusaciones. Mientras tanto, la desaparición de los dispositivos electrónicos de Rincón y la falta de claridad sobre el origen de los disparos mantienen el caso en el centro de la atención pública.
Fuente informativa:- La Razón