El exministro de Salud advirtió sobre los riesgos que podría traer hacer cambios abruptos en un sistema que se ha construido durante los últimos 30 años.
Una de estas voces es la del exministro de Salud Fernando Ruiz, quien es reconocido por haber enfrentado la pandemia del COVID-19, la mayor amenaza enfrentada por los sistemas de salud no solo de Colombia, sino de todo el mundo, en muchas décadas.
Contrario a lo que asegura la actual ministra, Carolina Corcho, Ruiz ve un sistema que a pesar de sus dificultades, funciona, y advierte que lo que está planteando el Gobierno es prácticamente acabar con el sistema y regresar a un sistema prácticamente basado en la caridad como el que funcionaba hace 30 años.
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Además, crítica la falta de transparencia del Gobierno para exponer el proyecto, que, salvo por algunos puntos expuestos en diferentes espacios, no se conoce en su integridad.
Sin conocerse el texto, ¿cómo evalúa la reforma a la salud propuesta por el Gobierno? ¿Qué consecuencias puede tener?
En primer lugar el proceso ha sido muy irregular. Una reforma que se ha anunciado hace meses, que tiene prácticamente detenido al sector salud, el Ministerio de Salud con una alta parálisis, todo enfocado a un proceso de reforma y un entorno de incertidumbre muy fuerte alrededor de todo el sector, incertidumbre financiera, incertidumbre en el futuro del sistema para los pacientes y también una serie de acciones y ataques que afectan la reputación de las organizaciones y de todo el sector.
Entonces, yo creo que hay un entorno muy complejo. Muy difícil que no haya un articulado después de un periodo tan largo, y al mismo tiempo una aseveraciones que hacen desde el Ministerio de que la reforma ya fue discutida.
Lo que se ha conocido del articulado inicial que el propio Ministerio salió a negar su paternidad, es por algunas presentaciones donde todavía no hay un articulado consistente, pero que ya dejan entrever básicamente lo que implica la reforma.
La ministra dice que hay que reformar las EPS porque están en una situación crítica, ¿cree que es necesario reformarlas y de la forma como se propone?
Este proyecto de ley es un proyecto que implica un cambio radical del sistema, plantea algunas inquietudes muy profundas más allá de las propias EPS. Esto prácticamente implica terminar con el sistema. Hasta ahora en las diferentes manifestaciones que se han hecho, básicamente lo que tienen es un articulado donde hay inquietudes grandes sobre todo en temas del aseguramiento, la financiación, la prestación de los servicios, el tema de las EPS es un ‘caballito de batalla’ me parece para tratar de desviar la atención, sobre las consecuencias que va a tener este cambio tan radical.
Obviamente las EPS han tenido dificultades, hay al parecer una intencionalidad del Ministerio de irlas ahogando poco a poco, pero más allá de esto yo sí creo que este sistema implica cambios a los colombianos muy profundos.
Veo prácticamente desaparecer todo el concepto de aseguramiento, el aseguramiento no son sólo las EPS sino todo lo que implica la garantía de servicios, de portabilidad de los servicios, es decir, que si a ti te atienden fuera de tu lugar de origen o donde vives tengas las garantías de los servicios, si se desaparecen las EPS quién te va atender cuando te enfermes en otro lado.
Un modelo totalmente territorializado, es decir, básicamente público, donde hospitales serán los que presten la atención, muy preocupante porque en Colombia solo hay cerca de 1.200 hospitales públicos y más de 10.000 hospitales privados y concentrar 50 millones de colombianos en una estructura pública, parece un tema bastante complicado y que va a conducir con seguridad a un racionamiento y a no dar los servicios requeridos por la población.
La reforma propone que la Adres asuma directamente el pago a clínicas y hospitales. ¿Eso no es volver en cierta forma al antiguo sistema de Seguros Sociales?
Eso no es una novedad porque realmente hoy en día por giro directo, se está pagando un porcentaje muy alto de las facturas, es decir ya la Adres gira directamente, lo que sí nos transforma en un nuevo Seguro Social y más que un nuevo Seguro Social, en un nuevo sistema de caridad como el que teníamos hace treinta años, es este modelo donde todos los pacientes entrarán por los hospitales públicos y la derivación, remisión a especialistas, a sistemas de alta complejidad va a estar controlada desde el propio hospital público, o de las propias instituciones públicas, lo cual va a generar listas de espera, que los pacientes no puedan tener sus procedimientos a tiempo y los hospitales privados van a sufrir seguramente consecuencias muy grandes de desfinanciamiento y problemas de demanda de servicios.
Hay un problema muy complejo, no es una mezcla entre un viejo seguro social y esto que llamábamos servicios excepcionales de salud hace muchos años, lo cual es profundamente regresivo, porque al final los ciudadanos y los pacientes van a dejar de recibir servicios y garantías de los mismos.
¿Qué opina de la creación de los Centros de Atención Primaria? ¿Van a terminar remplazando a las EPS?
El Ministerio maneja dos discursos, un discurso es el que maneja la ministra para tratar de convencer a los colombianos de que esta reforma no les va afectar sus derechos y otro es lo que se ve en los planteamientos, textos y presentaciones que hacen los funcionarios sobre lo que va a ser la reforma.
En esos textos lo que aparece claramente es un sistema eminentemente público donde las funciones de las EPS no es claro quién las va asumir.
En algunos momentos se han hecho declaraciones de que las va asumir el Estado, pero la pregunta es ¿quién, dentro de todo el Gobierno va a ser la entidad? Repito, el Adres es un banco, no un asegurador, si se le va a dar carácter de asegurador a la Adres, vamos a terminar como un viejo Seguro Social, ineficiente, lleno de burocracia y donde los pacientes se van a encontrar con barreras de entrada para poder adquirir servicios.
Las EPS se quejan de que la UPC no es suficiente para cubrir las necesidades del sistema. ¿Está de acuerdo con eso? ¿No es un rezago que viene de hace varios años?
Aquí ha habido un desfinanciamiento muy largo del sistema de salud, la demanda en servicios de salud ha venido creciendo de manera sustancial durante los próximos quince años, realmente lo que uno hoy ve un poco de quiebre de algunas EPS es el reflejo de un tema en el cual durante años los gobiernos han mantenido desfinanciado el sistema, al final la plata de la salud es una sola, se distribuye en una Unidad de Pago por Capitación (UPC), se le da por cada colombiano un valor, pero si ese dinero no alcanza las EPS entran en déficit y esta situación crónica se ha venido arrastrando durante muchos años.
Es necesario tener claridad sobre esas cuentas, deben ser transparentes, de pronto se necesitan más recursos, pero también hay que tener en cuenta los efectos que estamos teniendo en los últimos años, como por ejemplo lo que ha representado la inflación en el costo de todos los insumos para la atención en salud.
Los más pobres serán los más afectados
El Gobierno dice que está reforma no está destinada a las grandes ciudades sino a las zonas rurales y a zonas urbanas vulnerables, en donde es muy precaria la atención en salud. ¿Está de acuerdo en que el sistema, para determinadas poblaciones, sí está en crisis?
Yo creo que el sistema tiene limitaciones para atender las zonas más rurales de Colombia, que no son 20 millones de colombianos, sino son bastante menos de 10 millones, los problemas que hay allá, ahí hay de todo, desde el hecho de que en esas zonas solo hay hospitales públicos, hospitales muy ineficientes, con muchos problemas, pero también que es mucho más duro, complejo y costoso dar servicios en esas regiones, hay que buscar mejorar el sistema de salud y esto amerita un proceso de transformación y mejoramiento, mas no una reforma como la que plantean que es una reforma radical.
No es cierto que esto solo vaya a zonas rurales, porque lo que uno ve es que el sistema por lo menos como lo están presentando, es una transformación completa de todo el sistema de zonas rurales y urbanas, esto en lo que va a terminar es en una limitación al acceso a la salud y la gente que pueda pagar una medicina prepagada lo hará desde su bolsillo y afectados seguramente los más pobres de Colombia.
La reforma le da más atribuciones a clínicas y hospitales de ordenar procedimientos y cubrir tratamientos, ¿cree que ahí hay un riesgo de corrupción, teniendo en cuenta casos que ya se han presentado como el cartel de la hemofilia y otros?
Estos son casos ilustrativos de que en el sector público hay unos riesgos de corrupción absolutamente grandes, esos casos la gente no entiende muy bien el sistema y se les vende fácilmente que esto todo es un problema de las EPS, pero los grandes problemas de corrupción como el Cartel de la Hemofilia, carteles de atención de ciertas enfermedades en los programas nutricionales y demás han sido básicamente de los departamentos y los territorios.
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