La Corte Penal Internacional y la Jurisdicción Especial para la Paz fortalecen su alianza en la lucha contra la impunidad.
El Fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, ha rechazado la necesidad de reabrir el examen preliminar de Colombia, dejando claro que el país no es considerado un estado fallido. Durante una reunión estratégica con el presidente de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el magistrado Roberto Vidal, se consolidó una alianza que va más allá de la formalidad y busca promover el intercambio de conocimientos y experiencias entre ambas instituciones.
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El objetivo de esta sinergia es agilizar las investigaciones que llevan a cabo tanto la JEP como la CPI. En este encuentro de alto nivel se ha establecido un plan de trabajo conjunto que promueve la colaboración técnica en futuras investigaciones. El resultado de esta reunión sugiere que ambas organizaciones se centrarán en compartir aprendizajes y experiencias para impulsar la eficacia y rapidez de sus indagaciones.
Karim Khan hizo referencia a las revelaciones hechas por el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso y a la posibilidad de intervención de la CPI. Sin embargo, por el momento, se descarta dicha perspectiva. El fiscal de la CPI afirmó que existen vías claras para hacer justicia y rendir cuentas, y que la intervención del tribunal solo se dará cuando se determine que el país no está dispuesto o no puede hacerlo.
El punto de vista expresado por Khan es especialmente relevante en un momento en que Colombia se enfrenta a crímenes de lesa humanidad de una gravedad posiblemente inédita en América en las últimas décadas. Este pronunciamiento reafirma la confianza de la CPI en la capacidad y voluntad de la justicia colombiana para manejar estas investigaciones y juicios, resaltando la soberanía y la capacidad del país para resolver sus propios asuntos legales internos.
Este desarrollo demuestra el compromiso de Colombia con la justicia y la rendición de cuentas, así como la confianza de la comunidad internacional en las instituciones legales del país. La colaboración entre la CPI y la JEP estará vigilante para garantizar que los crímenes graves sean juzgados de manera justa y oportuna.