Un hombre de 55 años pagó más de $140 millones de pesos colombianos para ver en tiempo real agresiones sexuales a menores, en una operación conjunta entre autoridades francesas y colombianas que culminó con varias capturas.
La Fiscalía de París y la Oficina de Menores (Ofmin), en coordinación con autoridades colombianas, ejecutaron una detención simultánea sin precedentes. El blanco: un ciudadano francés de 55 años, los perpetradores locales en Colombia y los "moneyrunners" (intermediarios financieros). La presencia de un magistrado de enlace francés en territorio colombiano desde este año aceleró la cooperación, permitiendo "identificar y proteger a las víctimas menores". ( Además: Ejército Denuncia Secuestro Masivo de Militares en Cauca )
El sospechoso, identificado como un mecánico de Lille (norte de Francia), enfrenta cargos por "complicidad en trata de seres humanos con menores de 15 años víctimas de violación" y "adquisición habitual de pornografía infantil". Según el comunicado oficial, pagó más de €30 mil (unos $140 millones de pesos) para presenciar agresiones sexuales en tiempo real. Durante el allanamiento a su vivienda, se incautaron armas y material relacionado con los crímenes.
Durante cuatro años, el hombre ordenó entre 500 y 600 violaciones a menores y adolescentes colombianos ejecutadas por una familia local. Para financiarlas, recurrió a créditos bancarios, transfiriendo fondos a contactos en Colombia. La fiscalía parisina explicó: "La delincuencia pedófila en línea consiste en patrocinar agresiones sexuales desde un país contra menores en otros". Las víctimas eran obligadas por familiares directos a cambio de dinero.
Cooperación Internacional
La investigación se inició gracias a alertas del Centro Nacional de Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) de EE.UU. La Ofmin continuará trabajando para "determinar el alcance del fenómeno". El caso quedó en manos de jueces de instrucción franceses, mientras Colombia procesa a los responsables locales. Esta colaboración marca un modelo para combatir redes transnacionales de explotación infantil.
El arresto simultáneo de todos los eslabones (desde el financista hasta los ejecutores) evita que huyan o destruyan pruebas. Las autoridades priorizaron la protección inmediata de las víctimas durante las capturas. El caso expone cómo la tecnología facilita nuevas formas de abuso global, exigiendo respuestas ágiles entre naciones. La justicia francesa mantiene al acusado en prisión preventiva.
Fuente informativa:- API