El Papa Francisco es dado de alta y se recupera satisfactoriamente tras cirugía abdominal.
El Papa Francisco, de 86 años, ha sido dado de alta después de pasar nueve días hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma, donde fue sometido a una operación de abdomen. En su salida del hospital, el sumo pontífice fue recibido por una multitud de feligreses y periodistas mientras se desplazaba en una silla de ruedas.
Aunque con su característico sentido del humor, el Papa respondió a una periodista que le preguntó cómo se sentía diciendo: «Todavía vivo». Sin embargo, se tomará un tiempo para descansar y recuperarse antes de retomar su agitada agenda.
Si bien la audiencia general semanal del miércoles será cancelada para permitirle descansar adecuadamente, se espera que el Papa Francisco celebre la oración del Ángelus el próximo domingo. A partir del lunes, retomará todas las demás audiencias y reuniones programadas. A pesar de haber enfrentado problemas de salud en el pasado, como dolores de cadera, rodilla e infecciones respiratorias, se espera una buena recuperación tras esta última cirugía.
La operación abdominal a la que fue sometido tenía como objetivo reducir «adherencias» dolorosas en su pared abdominal, resultado de una cirugía de colon anterior realizada en julio de 2021. El cirujano, Sergio Alfieri, encargado del tratamiento, afirmó que el Papa está en mejores condiciones que antes y se espera una recuperación satisfactoria.
A lo largo de su estancia en el hospital, el Papa Francisco continuó trabajando desde su habitación en el décimo piso del Policlínico Gemelli, conocido como «el hospital de los papas». Además, tuvo la oportunidad de visitar el departamento de oncología pediátrica y neurocirugía infantil, donde pudo interactuar con los jóvenes pacientes y recibir mensajes de apoyo y buenos deseos.
La salida del Papa del hospital se llevó a cabo bajo un fuerte dispositivo de seguridad, y se trasladó en su característico Fiat 500 blanco.
