Cardenales se aíslan en la Capilla Sixtina para buscar al sucesor del Papa Francisco.
La Capilla Sixtina del Vaticano celebra desde este miércoles, 7 de mayo de 2025, un cónclave. En él, 133 cardenales, aislados del exterior, buscarán al sucesor del Papa Francisco. Este proceso marcará la dirección de la Iglesia Católica los próximos años. El resultado de esta antigua y solemne ceremonia para coronar un nuevo pontífice siempre es impredecible, pero, como siempre, ya hay nombres que circulan con mayor intensidad en los mentideros romanos. ( Además: Procurador Eljach pide a Petro frenar violencia )
Este será el cónclave más concurrido y heterogéneo de la historia de la Iglesia Católica. Cuenta con 133 electores que llegaron de los más insospechados rincones del planeta. Su composición es fruto de los intentos del Papa Francisco por "descentralizar" la Iglesia y restar su tradicional tracción europea, buscando una representación más global entre los cardenales electores.
Los purpurados con derecho a voto, es decir, los cardenales menores de 80 años, ascendían en realidad a 135. Sin embargo, dos de ellos han renunciado a viajar a Roma por motivos de salud, por lo que el cónclave inicia con 133 electores. Los cardenales ausentes son el español Antonio Cañizares y el keniano John Njue, quienes no pudieron estar presentes en el Vaticano.
Secretismo riguroso y juramento de los cardenales
Todo el proceso del cónclave deberá transcurrir con el mayor secretismo posible, a pesar de la enorme atención mediática internacional. Cada uno de los purpurados jurará, bajo pena de excomunión, no revelar nada de lo que ocurra bajo las bóvedas y los frescos de la Capilla Sixtina, garantizando así la confidencialidad de las deliberaciones y votaciones para elegir al nuevo Papa.
El cónclave empezará en la mañana de este miércoles con la misa ‘Pro Eligendo Pontefice’. Se realizará a las 10.00 horas locales (8.00 GMT) en la basílica de San Pedro del Vaticano. Después, todos los cardenales se darán cita a las 16.15 (14.15 GMT) en la Capilla Paulina, en la primera planta del Palacio Apostólico.
Desde la Capilla Paulina, ataviados con sus hábitos rojos y blancos, los cardenales procesionarán entonando las letanías y el canto ‘Vieni Creator’ hasta la Capilla Sixtina. Se prevé la entrada a este monumental lugar a las 16.30 horas (14.30 GMT). En primer lugar, los purpurados deberán prestar juramento con la mano sobre el Evangelio, uno a uno.
La primera fumata y su significado para la Iglesia Católica
Cuando todos los cardenales lo hayan pronunciado, el maestro ceremoniero de la Santa Sede, Diego Ravelli, expulsará de la Capilla Sixtina a todo aquel que no vista la púrpura con la famosa fórmula en latín ‘Extra omnes’ (fuera todos) y cerrará sus puertas. Desde ese momento, los prelados quedarán aislados en el Vaticano para votar a un sucesor del Papa Francisco, quien falleció el pasado 21 de abril con 88 años, tras poco más de doce años de pontificado.
Las autoridades del Vaticano esperan ya la primera ‘fumata’ esa misma tarde del miércoles, tras la primera votación. La chimenea en lo alto de la Capilla Sixtina emanará el humo de los votos que los cardenales quemaron en una estufa en su interior. Si el humo es de color negro, querrá decir que no ha habido acuerdo sobre el nuevo Papa; si es blanco, significará que hay un nuevo pontífice.
Lo más probable es que el acuerdo no se produzca en la primera votación del cónclave. Por ello, el encierro de los cardenales seguirá durante los próximos días por un tiempo impredecible. La noche, los cardenales la pasan en la Casa Santa Marta y otra dependencia dentro del Vaticano. La legislación de la Santa Sede prevé cuatro escrutinios al día, dos por la mañana y dos por la tarde. Si después de tres días los cardenales no se han puesto de acuerdo, entonces les concederán una pausa de un día para reflexionar y "hablar entre ellos".
Fin del proceso y presentación del nuevo Papa
La ‘fumata’ blanca desde la chimenea de la Capilla Sixtina pondrá punto y final a este proceso de elección del nuevo Papa. Poco después, el nuevo Papa se presentará ante los fieles, la ciudad y el mundo asomándose a la logia central de la basílica de San Pedro del Vaticano. La Santa Sede pondrá así fin a su periodo de ‘sede vacante’, que comenzó con la defunción del Papa Francisco.
En los días previos al cónclave, los cardenales se han ido viendo según llegaban a Roma desde sus ciudades o diócesis. Se reunieron en las llamadas congregaciones generales. Muchos cardenales ni siquiera se conocen entre sí. Los temas a tratar para la Iglesia eran incontables, siendo el central definir si seguir o no la línea pastoral del Papa Francisco.
Debido a la cantidad de temas y el desconocimiento entre muchos purpurados, en los últimos días decidieron intensificar la periodicidad de estos encuentros pre-cónclave hasta dos al día, por la mañana y por la tarde. En el cónclave no hay candidatos oficiales, sino que cada cardenal elector vota a quien le parece o le convence más. No obstante, hay algunos nombres que se presentan en los rumores como "pesos pesados" con mayores posibilidades de ser elegidos Papa.
En esta terna, que forman rumores y algo de especulación en el Vaticano, destaca el secretario de Estado de Francisco, Pietro Parolin. También se mencionan los italianos Matteo Zuppi y Pierbatista Pizzaballa; el filipino Luis Antonio Tagle; o el estadounidense Robert Francis Prevost, como cardenales que podrían suceder al Papa Francisco.
El cónclave en el Vaticano mantendrá en vilo a la Iglesia Católica y al mundo, a la espera de la fumata blanca que anuncie al nuevo Papa.
Fuente informativa:- Agencia EFE