Las fincas, ubicadas en el municipio de Vergara, Cundinamarca, eran propiedad del fallecido narcotraficante Gonzalo Rodríguez Gacha.
Un nuevo futuro se abre para ocho familias campesinas que sufrieron el desplazamiento forzado por el conflicto armado colombiano. Estas familias recibieron este jueves la adjudicación de más de 35 hectáreas de tierra que pertenecían al extinto capo del narcotráfico Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’.
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El proceso de entrega de las tierras fue liderado por la Agencia Nacional de Tierras (ANT), que las compró a la Sociedad de Activos Especiales (SAE), entidad que administra los bienes incautados a la delincuencia organizada. Las fincas, llamadas Las Quinianzas, San Felipe y Las Esmeraldas, están ubicadas en la vereda Córcega del municipio de Vergara, cercano a Bogotá.
Según informó la Presidencia de la República, las tierras tienen “suelos fértiles para el cultivo de alimentos en clima templado” y fueron divididas en parcelas de 4,4 hectáreas para cada una de las familias beneficiadas. Estas familias son originarias de los municipios de Pacho y Soacha, en Cundinamarca, así como de las regiones del Catatumbo, fronteriza con Venezuela, y del Putumayo, limítrofe con Ecuador y Perú.
“Estas familias han sido víctimas de la violencia, del desplazamiento, de la pobreza y hoy les estamos entregando una oportunidad para que puedan reconstruir sus vidas”, dijo el director de Acceso a Tierras de la ANT, Tony Luis Lozano.
Uno de los beneficiarios es Isidro Raigozo, quien tuvo que abandonar su hogar en Villagarzón, Putumayo, para evitar ser asesinado. Raigozo expresó su agradecimiento por la oportunidad de recibir este terreno, que considera que marcará un “nuevo futuro” para él y su familia. “Dios bendiga esta tierra que será el nuevo futuro para mí, para mis hijos y toda mi familia. No tengo palabras para explicar la felicidad que siento al estar en un terreno que ya es propiedad mía”, manifestó.
Gonzalo Rodríguez Gacha, conocido como ‘El Mexicano’, fue uno de los fundadores del Cartel de Medellín y uno de los mayores narcotraficantes de Colombia. Murió junto con su hijo Freddy en una operación policial el 15 de diciembre de 1989 en Tolú, un pueblo caribeño del departamento de Sucre.