El pintor y escultor colombiano falleció a los 91 años en su casa de Medellín tras sufrir una neumonía.
Colombia y el mundo se despidieron este viernes de Fernando Botero, el pintor y escultor que plasmó en sus lienzos y esculturas la belleza de las formas redondas.
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El artista murió a los 91 años en su casa de Medellín, donde seguía pintando hasta que una neumonía lo obligó a ingresar al hospital.
Botero nació el 19 de abril de 1932 en Medellín y desde niño mostró su talento para el arte. A los 16 años publicó sus primeras ilustraciones en el periódico El Colombiano y a los 19 años ganó el primer premio del Salón Nacional de Artistas. Su carrera lo llevó a viajar por Europa y Estados Unidos, donde se inspiró en diferentes estilos y corrientes artísticas.
Su obra se caracteriza por la representación de figuras humanas, animales y objetos con proporciones exageradas y voluminosas, que él llamaba “boterismo”. Sus pinturas y esculturas reflejan la cultura, la historia y la realidad social de Colombia y América Latina, con un toque de humor e ironía. Sus obras se han exhibido en los museos más importantes del mundo y han alcanzado altos precios en las subastas.
El expresidente colombiano Juan Manuel Santos expresó su pesar por la muerte de Botero y lo calificó como “uno de los más grandes artistas de Colombia y del mundo”. También destacó su generosidad con su país, su amistad y su pasión por la paz.
