Fundación Santa Fe reporta avances médicos en senador tras 16 días en UCI, pero mantiene pronóstico neurológico reservado. Procedimientos quirúrgicos recientes marcan transición crítica.
El senador Miguel Uribe Turbay muestra progresos tras superar 16 días hospitalizado. La Fundación Santa Fe de Bogotá informó este martes sobre su transición a una fase subaguda. Este cambio sigue a intervenciones quirúrgicas esenciales realizadas en las últimas 72 horas. El precandidato presidencial permanece en cuidados intensivos desde el ataque del 7 de junio. ( Además: Afinia realizará mejoras eléctricas del 26 al 28 de junio )
Su condición general sigue clasificada como grave. El equipo médico destaca la estabilización relativa como paso significativo. Sin embargo, la evolución neurológica aún genera preocupación clínica. El director médico Adolfo Llinás Volpe firmó el parte matutino.
Dos intervenciones clave apoyaron la transición del paciente: traqueostomía y gastrostomía. Estos procedimientos forman parte del plan de desescalada terapéutica. Facilitan la reducción progresiva de soportes vitales invasivos. La traqueostomía optimiza su respiración asistida.
La gastrostomía permite alimentación enteral directa. Ambos se consideran hitos en pacientes críticos prolongados. El comunicado precisa que recibió atención quirúrgica continua. Cada acción responde a protocolos para trauma complejo.
Pronóstico reservado
A pesar de los avances técnicos, el panorama neurológico permanece incierto. El parte médico emplea el término "reservado" para describir su pronóstico. Esto implica posibles secuelas cognitivas o funcionales por evaluar. La gravedad de su condición no ha disminuido sustancialmente.
El documento cita textualmente: "Su condición es grave y su pronóstico neurológico reservado". Esta frase refleja la cautela médica ante complicaciones futuras. La recuperación neurológica suele ser más lenta que la física.
Un equipo multidisciplinario vigila las constantes vitales las 24 horas. El enfoque terapéutico integra diversas especialidades médicas. Esta estrategia busca anticipar complicaciones secundarias. El tratamiento incluye manejo de infecciones y soporte orgánico.
La institución enfatiza la coordinación entre neumólogos, neurocirujanos y fisiatras. Todos trabajan bajo un protocolo unificado. La fase subaguda exige ajustes diarios en medicación. Cada variación responde a indicadores específicos.
Ingreso a fase subaguda
La fase subaguda implica nuevos desafíos terapéuticos. Ahora priorizan prevención de infecciones intrahospitalarias y estimulación neurológica. Los siguientes 14 días serán determinantes para evaluar secuelas. La traqueostomía permite iniciar terapia respiratoria progresiva.
Expertos independientes coinciden: recuperarse totalmente llevará meses. El senador enfrenta posible rehabilitación motriz y cognitiva. Todo dependerá de su respuesta neurológica en las próximas semanas.
- La Razón
