Pérdida de biodiversidad en el Macizo Colombiano preocupa a las autoridades.
En el marco de la COP16, celebrada en Cali, la Defensoría del Pueblo emitió un documento alertando sobre el deterioro de los ecosistemas y la pérdida de biodiversidad en el Macizo Colombiano. Este informe destaca la disminución de la capacidad de los ecosistemas para proporcionar beneficios esenciales para la vida humana y la salud ambiental. ( Además: Gobernadora del Cesar impulsa proyectos comunales )
La Defensoría advierte que el Macizo Colombiano, donde confluyen los biomas Andino, Amazónico y Pacífico, enfrenta graves amenazas debido a la minería legal e ilegal, la expansión de cultivos ilícitos y la falta de control institucional. Estas actividades no solo contaminan los recursos hídricos, sino que también destruyen hábitats vitales, afectando la flora, la fauna y las comunidades locales.
La Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, instó a las autoridades ambientales a implementar acciones de restauración ecológica y consolidar instrumentos de planificación que aseguren la sostenibilidad de los ecosistemas. Además, enfatizó la necesidad de estimar de manera precisa los valores asociados al uso de recursos naturales para garantizar los derechos humanos.
Recomendaciones específicas
La Defensoría hizo más de 50 recomendaciones a diversas instituciones nacionales y locales. Entre ellas, pidió al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y al Congreso de la República profundizar en la intervención de amenazas y vulnerabilidades que afectan los ecosistemas estratégicos. También solicitó al Ministerio de Educación incluir programas de educación ambiental y al Ministerio de Agricultura promover prácticas agrícolas sostenibles.
La Defensoría también llamó al Ministerio de Defensa, la Policía Nacional y el Ejército Nacional a coordinar con Parques Nacionales Naturales y otras entidades para cerrar las bocatomas ilegales de minería en el Macizo Colombiano. Además, subrayó la importancia de proteger a los defensores de derechos humanos y líderes ambientales mediante medidas administrativas y colectivas.
El cambio climático representa una amenaza significativa para los ecosistemas del Macizo Colombiano, alterando patrones de precipitación y temperatura. La falta de datos actualizados dificulta la toma de decisiones informadas y la implementación de medidas de protección adecuadas. La presencia de conflictos armados también crea un entorno de inseguridad que complica la gestión sostenible de los recursos naturales.
