En el Cementerio Jardines del Eccehomo se construyen 260 bóvedas en el módulo nueve, solo para covid
Ludys Ovalle Jácome
Especial para El Tiempo
Valledupar
Nuevas bóvedas subterráneas se construyen en los cementerios de Valledupar.
Con la adecuación de estos espacios, se garantiza la inhumación de los cadáveres durante la emergencia sanitaria generada por el coronavirus.
“Estas áreas se construyen acorde a las especificaciones establecidas para estos casos”, explicó Jorge Luís Fernández, funcionario de la dimensión ambiental de la secretaría local de salud.
En el Cementerio Jardines del Eccehomo, localizado en las afueras de la ciudad, se construyen 260 bóvedas en el módulo nueve, destinado específicamente para los fallecidos por covid-19.
El ritmo de construcción avanza cada día, por lo que muchos de los trabajadores de este lugar deben redoblar esfuerzos, ya que la cantidad de gente fallecida ha sido mayor a lo que esperaban.
“En la pandemia han aumentado los entierros, al comienzo eso era de cada rato. Hubo que establecer turnos porque los sepultureros se agotaban. Diariamente estamos sepultando entre ocho y diez personas en este sitio”, sostuvo Fredys Sierra Guerra, administrador operativo del cementerio Jardines del Eccehomo.
Tras el incremento de estos casos, se ha contemplado la ampliación de otros módulos para estos fines.
“Si la cosa sigue, así como vamos, tendremos que organizar otros módulos. Pero aclaramos que son bóvedas construidas”, recalca Sierra.
En ciertas ocasiones, se presentan situaciones inusuales, especialmente cuando los familiares del fallecido se les da por abrir el ataúd.
“Se ponen rebelde, quieren destapar la caja para asegurarse que el cadáver corresponda al familiar”, explica.
Según el último informe entregado por la secretaría local de salud Valledupar registró 101 fallecidos por covid-19, durante el periodo del 18 al 28 de mayo, para un acumulado total de 1.019.
Retraso por parte de EPS para muertes en casa
El proceso se inicia con el certificado de defunción de la persona y posteriormente con el embalaje en unas bolsas especializadas.
“La norma establece que hay que hacer el traslado desde el sitio de la muerte hasta el cementerio en el menor tiempo posible, por la ruta más cercana, cumpliendo estrictamente los protocolos para estos fines”, subraya el funcionario de la secretaría local de salud.
En ocasiones se presenta retraso por parte de las EPS, sobre todo para las muertes en casa, ya que no actúan de manera oportuna.
“Cuando los usuarios llaman para reportar la muerte, no hay una respuesta inmediata y el fallecido permanece más tiempo en el lugar de residencia”, añade el funcionario.
Agrega además que: “Otras veces, las empresas de salud activan la ruta oportuna, sin embargo, los familiares prefieren una prueba ‘post mortem’ para realizarse las honras fúnebres al fallecido. Esto no es lo ideal porque se exponen al contagio”, puntualizó.
Fuente informativa:
eltiempo.com
Directora de Comunicaciones de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva,
Amplia experiencia en diferentes medios: Periodismo, Imagen Corporativa, Comunicación Organizacional, Marketing político, Relaciones Públicas, Protocolo, Proyectos Televisivos a nivel nacional, Asesoría de comunicación, Desarrollo de páginas Web y Mercadeo.