URT ha procesado más de 100 nuevas solicitudes en los primeros tres meses del año, centrando sus esfuerzos en las comunidades de Mechoacán y El Prado.
En el municipio de La Jagua de Ibirico, uno de los más afectados por el conflicto en Colombia, la URT ha estado trabajando incansablemente en el procesamiento de reclamaciones de víctimas de despojo y/o abandono forzado. En particular, las comunidades campesinas de Mechoacán y El Prado han sido el foco de estos esfuerzos.
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En los primeros tres meses de 2024, la URT ha procesado más de 100 nuevas solicitudes de restitución. Una vez admitidas, estas solicitudes activaron la etapa administrativa, dando lugar a análisis previos e inicio de estudios formales.
Cambio de Enfoque en la Administración
En el pasado, estos casos emblemáticos de reclamación de tierras a menudo terminaban con decisiones negativas para las víctimas, debido a la poca prioridad que se daba a asuntos relacionados con la actividad minera. Sin embargo, esta situación ha cambiado, y la atención prioritaria que la Unidad ha dado al campesinado reclamante de las parcelaciones Mechoacán y El Prado es un claro ejemplo de ello.
Estos logros también son el resultado del acuerdo alcanzado entre la Unidad de Restitución de Tierras y la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Esta colaboración busca garantizar la verdad, la justicia y la no repetición de la violencia en los territorios, en línea con la misión de la entidad y el pacto descrito.
Fuente informativa:- Cacica Estéreo