Gobernador Erasmo Zuleta compara las pérdidas anuales, estimadas en $55.000 millones, con lo que costaría alimentar a 170.000 estudiantes durante 90 días escolares y llama a combatir el flagelo.
El gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta Bechara, reveló el impacto económico y social del contrabando en su departamento durante el lanzamiento del Plan Caribe y la mesa regional anticontrabando. Zuleta comparó las pérdidas que genera el comercio ilegal con el costo de programas sociales esenciales, como la alimentación escolar. ( Además: Recompensa sube a $60 millones por atentado en El Paso )
“Una simple comparación: lo que dejamos de percibir por contrabando nos serviría para financiar la alimentación escolar de 90 días de 170.000 niños, niñas y jóvenes del departamento de Córdoba”, explicó Zuleta. Con esta comparación, el mandatario buscó dimensionar el impacto directo que el comercio ilegal tiene en la calidad de vida de los cordobeses y en la financiación de programas sociales.
El gobernador cifró las pérdidas anuales que el contrabando genera en las rentas departamentales en aproximadamente 55.000 millones de pesos. Estos recursos provienen principalmente de impuestos aplicados al consumo de tabaco, alcohol y cerveza, que se ven afectados por la entrada ilegal de estos productos.
Durante su intervención en el evento, donde también participó como presidente de la Federación Nacional de Departamentos, Zuleta destacó la importancia de que el sector público y el privado trabajen juntos para combatir este flagelo. Resaltó que el contrabando afecta directamente la financiación de los programas sociales que impulsan los departamentos.
“Debemos seguir articulando esfuerzos porque yo sé que en la empresa privada quien aporta diariamente al crecimiento económico de Colombia”, señaló el gobernador. Mencionó, en este contexto, un reciente acuerdo firmado entre la Federación que preside y la empresa tabacalera PMI, el cual busca fortalecer la capacidad operativa de las autoridades en la lucha contra el comercio ilegal de cigarrillos y otros productos.
Fuente informativa:- La Razón