La nueva normativa de la Dian establece límites para la emisión de facturas POS y promueve la factura electrónica en ventas superiores a $212.000.
Las máquinas registradoras que emitían tirillas impresas, conocidas como facturas POS, tendrán validez únicamente para ventas inferiores a los $212.000, según la nueva normativa establecida por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) en la Resolución 1092, emitida el 1 de julio de 2022. Este cambio impactará en la operación diaria de diversos negocios en Colombia, incluyendo supermercados, restaurantes y tiendas minoristas.
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Sin embargo, los negocios de barrio, como panaderías, salones de belleza, papelerías y misceláneas, enfrentarán un cambio significativo debido a esta nueva medida. Según Fenalco, en Colombia existen más de 720.000 tiendas de barrio, de las cuales 215.000 son tiendas tradicionales. Estos establecimientos manejan alrededor de 45 categorías de productos, que incluyen elementos de la canasta básica, dulces, bebidas, entre otros.
La normativa establece que se seguirá permitiendo la entrega de la tirilla POS en ventas inferiores a los $212.000, que equivalen a 5 UVT (Unidades de Valor Tributario), antes del IVA. El cálculo se realiza con base en la UVT establecida para el año 2023, que es de $42.412. Es importante tener en cuenta que esta medida está vigente desde el 1 de abril.
Es fundamental destacar que esta medida aplica a los declarantes del impuesto sobre la renta y complementarios, a los declarantes de ingresos y patrimonio que no sean considerados grandes contribuyentes, y a aquellos que estén obligados a facturar electrónicamente.
Ante esta nueva normativa, los negocios de barrio deberán adaptarse a los cambios y evaluar la posibilidad de implementar la factura electrónica en sus operaciones. Esto implicará ajustes en los sistemas y procesos internos, así como la capacitación del personal para cumplir con los requisitos exigidos por la Dian.
El objetivo de esta medida es impulsar la digitalización de las transacciones comerciales y promover un mayor control fiscal. La factura electrónica permite una mayor trazabilidad de las operaciones y facilita el cumplimiento de las obligaciones tributarias tanto para los comerciantes como para las autoridades.